Desde su formación en 2012, Eye Of Nix, de Seattle, se ha consolidado como un maestro de la yuxtaposición. A lo largo de un EP y dos álbumes, acompañados de una gira constante, han fusionado belleza y crudeza creando un sonido característico que fusiona el doom ferviente, el black metal explosivo y el rock psicodélico. El tercer álbum del quinteto es un vórtice oscuro y seductor que gira alrededor de una luz inextinguible, arrastrando a los oyentes a través de altibajos de ruido cacofónico y melodía eufórica.