El álbum de segundo año de T-TOPS, "Staring at a Static Screen", es de lo más crudo y empapado de detritos urbanos. El nuevo álbum del trío es una sinfonía sucia de accidentes de coche, callejones mugrientos, vaqueros desgastados y un sinfín de antipatía hacia la clase obrera, traducida a formato musical. Estas canciones dan voz a cada impulso aullante que se esconde en lo más profundo de su ser, y con cada vuelta, la sangre hierve más.
Originarios de Pittsburgh, Pensilvania, la antigua ciudad siderúrgica estadounidense, T-TOPS son la personificación del rock ruidoso, implacable y con influencias punk. Fieles al estilo urbano, el nombre de la banda deriva del techo desmontable de los coches, popularizado en Estados Unidos en la década de 1970, época en la que el punk descontento comenzaba a consolidarse en el underground musical.
El sonido de T-TOPS se nutre en gran medida de bandas tan directas como UNSANE y MOTÖRHEAD, así como del hardcore de la Costa Este. Fundada por el guitarrista y cantante Patrick Waters, esta veterana banda cuenta con más de una década de conciertos contundentes, interpretados con determinación. Sus riffs contundentes se ven realzados por la potente sección rítmica de Mike Koch a la batería y el bajista Matt Schor.
"Staring at a Static Screen" es una losa de hormigón imponente, hermosa e inflexible que, al igual que sus creadores, simplemente no se rinde. Los seguidores de CANCER BATS, ZEKE y THE MELVINS pueden engancharse a diferentes partes del álbum, que abarca desde la energía desgarradora de "Burn the River" hasta la asombrosamente contemplativa versión de Fleetwood Mac de "What Makes You Think You're the One". T-TOPS están de vuelta y su misión es simplemente darlo todo con la mayor intensidad posible.